¡Damas y caballeros!, ¡leidis an yentlemen!, ¡chicos y chicas de la vida alegre!,
les saluda su amigo Memo R. Díaz-el garrote-, desde la unidad móvil de la radio YSTYD-“la
voz del cutete”, que en esta ocasión transmite en vivo, en directo y en cadena con
el canal 4 ½-“el Canal del Gato con Jiote“- desde el boulevard de los ebrios, perdón,
de los Héroes; para traerles hasta sus hogares el primer gran “desfile de las brosas”.
Este desfile está siendo auspiciado por el Instituto Salvadoreño de Turismo (ISTU)
como una forma de promover la industria turística, ya que esta parte de la economía
nacional ha sido golpeada tremendamente después de los terremotos del año pasado y
los atentados terroristas en los Yunáis; y se ha pensado que este desfile servirá para
atraer a los turistas extranjeros, pues los únicos turistas que nos visitan son los
mismos guanacos, o “hermanos mojados” que salieron barajustados huyendo de la guerra,
o por que no encontraban chamba ni de ayudante de ayudante del ayudante.
El
ISTU quiere hacer de este desfile toda una tradición nacional, para lo cual se designó
el primer día de enero para realizarlo, y así estar en competencia directa con el famoso
“Desfile de las rosas” de Pasadena. En esta forma, en lugar que se queden en sus
casas viendo las carrozas gringas adornadas con flores después de la sirindanga que
se zamparon el 31, vengan a quitarse la goma con una sopita de chorizo con huevo
o de patas y un par de polarizadas a cualquier chupadero del boulevard, y al mismo
tiempo que les vengan a hacer barra a las carrozas de la mara, majada o brosa de
su colonia, barrio, ciudad, cantón o caserío de procedencia.
Antes de narrarles
todos los pormenores de este magno evento, déjenme echarme un talahuashtazo de Muñeco,
pañuelo rojo, para remojar la garganta que la ando seca desde las doce de la noche,
hora en que ya no venden guaro en las cantinas por orden del barbudo alcalde.
Esta
transmisión es traída a ustedes por un gentil patrocinio de TACA-bron, (la aerolínea
pésima de los guanacos); por el BGA (Banco de Güeveyo Agropecuario); por ANDA (Andá
ve si ya salió agua del chorro); por el PDC (Partido Difunto Corrupto); por el ISSS
(Instituto Salvadoreño del Seguro Sablazo); por SECUESTRO (Secuestro de Empresarios,
Curas, Estrellas de fútbol, Transportistas y Otros).
Así que pónganse cómodos
en su silla favorita porque en este preciso momento el Mariscal del Desfile de las
Brosas-el Chele “Papaya“- hace su aparición inaugurando el desfile.
Viene encaramado
en un pick up de la PNC saludando a toda la concurrencia con las manos enchuchadas,-
como corresponde a un reo de su peligrosidad-, y viene tirando billetes falsos de
a cinco y veinte dólares a los bichos y viejitas que madrugaron y aguantaron frío toda
la noche para agarrar los mejores puestos para ver el desfile
Atrás viene la primer
carroza del evento. Se trata de la carroza de TAMALES (TAmarindos, MAricones y LESbianas).
Esta hermosa carroza trae como tema “no somos machos, pero somos muchos”. Viene en
forma de enramada tipo el Rancho de Mario en el Majagual. Está construida con varas
de Castilla y palmeras de coco enano y adornada con racimos de coyoles, mamones y
guineyo majoncho,-frutas muy apropiadas para ellos-. La carroza es una carreta jalada
por una yunta de bueyes con Antrax. Vienen saludando al público: Lola “la Trailera“,
del penal de Oriente; Juana “Puñales“, del reclusorio de mujeres; y Toño “Chiches“,
de Mariona.
Luego le sigue la carroza de la “mara salvatrucha”. Su carroza
viene montada en un pick up robado en Los Ángeles y traído especialmente para la ocasión.
Al centro de la carroza tiene formada, con letras gigantes, las siglas “MS” con palmeras
de coco sonsonateco. Está adornada con hojas de marihuana, hojas de coca, capullos
de amapola, flores de floripondio y hongos alucinógenos.
Atrás viene la primera
banda musical del desfile. Se trata de una pulún-pulún que toca en la Plaza del Trovador.
Vienen interpretando la cumbia “Vení vení” y "la cumbia del peine" de la
Chanchona de Arcadio.
La segunda carroza pertenece a la mara “18”. Esta hermosa
carroza está adornada con hojas de palo di´hule, mano de león, cola de ardilla y musgo
de Montecristo. El tema de su carroza es “¡que me ves hijuesesentamilquinientasputas!”.
Vienen
haciendo valla de honor a dicha carroza-como Boy Scouts- un montón de cipotes huele
pega,-piedra en mano-, pidiendo un Dólar por pedrada; o lo contrario, por no pedrada.
Luego
viene un grupo de cachiporritas, cuyas integrantes son un grupo de “dormilonas”y
“trabajadoras del sexo” que tiene su centro de operaciones por la Juan Pablo II.
Vienen haciendo piruetas con sus bastones y guachando a ver a que bolo gomoso y zopilotiado
le bajan el pisto y lo dejan chulón en medio del desfile.
El primer grupo ecuestre
del desfile lo constituyen dos machos secos de la Policía de Turismo. El primer jamelgo
es un hermoso ejemplar de la raza arábiga, que fue donado por el jeque de Arabia Saudita
a nuestro país. Su nombre es “Bendejo”. Nombre que le fue dado al caballo por el señor
cónsul cuando le preguntaron el ¿por qué lo habían mandado de cónsul a El Salvador?, y
el respondió: “bor bendejo”. El otro caballo es un paso fino peruano. Se llama “Fujimori
Montesinos”. Porque se “mete los pases” muy finos.
Atrás viene la banda de
guerra del Instituto de Rehabilitación del Menor Infractor. Chepe “Tripas” toca la
trompeta, Juan “Sapo cuto” trae la tuba, Julio “Manteca” el acordeón y Tino “Moco
de chumpe” el saxofón.
Y para alegrar más el desfile y hacer reír a la gente
aquí viene un grupo de payasos. Viene el payasito “Paquito”. Es un payasito negrito
murusho. Viene contando cuentos a nacionales y extranjeros que El Salvador es un
país próspero y globalizado. Le hace la segunda el payaso “Dabú”, que viene contando
cuentos chinos que la dolarización es la panacea para los problemas del país. Vienen
también payasitos vestidos de colorado. Viene el payaso “Chafa-ick” hablando paja
que el comunismo es la última Coca Cola en el desierto. Con él viene el payasito “Chancho
Cerón” quemando banderas gringas y acarreando una foto de su héroe Osama.
Atrás
de ellos viene un resto de viejas vendedoras ambulantes silbando la conocidísima partitura
musical de “La vieja” al alcalde de San Salvador, porque las mandó a la mier...coles
de ceniza del centro histórico con todo y tanates, canastos y tumbillas.
Para
cerrar con broche de oro este primer “Desfile de las Brosas” vienen sonando sus estridentes
pitos y echando humo como locomotoras más de cuatrocientos buses-de los que fueron
declarados fuera de servicio por el Ministerio de Transporte por viejos, destartalados
y en mal estado mecánico-. Conduciéndolos vienen, chillando a moco tendido, sus propietarios.
Vienen todos ahuevados y prometiendo que “ya no lo vuelven a hacer”, porque no les
salió la movida chueca de que se fueron a la huelga exigiendo el subsidio del Diesel
y les salió el tiro por la culata, en este caso, por el mofle.
Así que amigos,
en ésta forma llega a su fin este primer “desfile de las brosas”, no sin antes darle
las gracias por su atención y agradecerles por aguantarme el galillo de chucho tísico
que me manejo; y hacerles la más cordial invitación para que nos acompañen en el próximo
control remoto que, posiblemente, haremos en Semana Santa desde alguna playa de El
Salvador. De mi parte y del personal técnico a cargo de esta unidad móvil, les damos
las gracias por su sintonía. Y ya nos vamos porque detrás del Camino Real vienen los
del CAM y me pueden llevar jalado por estar encaramado en el Monumento a los Héroes
y ya me vienen a “apiar”
Y al compás del “sombrero azul” así nos vamos cantando:
Ya
llegó el desfile de las brosas,
con mareros, drogos y ladrones.
Hay dormilonas
y maricones,
y también políticos y otras cosas.
En lugar de irse al Majagual
el día primero de enero,
sea usted del frente
o arenero,
venga a disfrutar este evento sin igual.
Y si no quiere que lo pare la cuilia.
por vago, borracho o mariguano,
llegue
al desfile bueno y sano
que a lo mejor aquí se encuentra
a su mujer, o alguno
de su familia.