No, no voy a referirme al despojado estado de
California sino a una ciudad nuestra que supe existía
con este nombre cuando adolescente. Jamás había oído este nombre fuera el nombre
de un pueblo nuestro, siempre lo creí exclusivo gringo, hasta el 20 de febrero de
1972, cuando el Gran Fraude electoral.
Me repugnó darme cuenta que una ciudad con
nombre "gringo" existiera en mi tierra; sin embargo, hoy me doy
cuenta que el nombre California tiene raíces latinas, significa
“horno caliente” y fue palabra usada ampliamente durante la
colonia, en el viejo castellano.
La noche del Gran Fraude, en 1972,
me sentaba en mi casa en la colonia Santa Lucía de Ilopango a
la par de una radiolita Sharp a oír la YSKL, no oía el partido de
fut sino el conteo de votos
ese trágico domingo de elecciones. El complejo
militar/oligárquico/gringo comenzó el conteo de votos en las
áreas rurales creyendo allí eran fuertes pero se dieron en la
nuca. La primer ciudad que comenzaron fue precisamente
California... ¡Saco! Me dije a mi mismo, tenemos una ciudad
nombre gringo en el pulgarcito.
Me he rebuscado buscando
datos históricos sobre esta bella ciudad de oriente sin
encontrar casi nada, y no tiene web page propio como
Nueva Esparta, Pasaquina, La Palma,
etc…, pero California se halla localizada en el otrora llamado "granero de la
república", o sea, el departmento de Usulután.
Tiene
una población de más o menos tres mil cuscatlecos y limita al
norte con Santiago de María, al sur con la ciudad de
Usulután, al este con la ciudad “tabuda” de Santa
Elena, y al oeste con la ciudad de Tecapán... y
ciudad Alegría, cuna del escritor AlbertoMasferrer, se halla a sólo ocho
kilómetros.
Esta zona usuluteca, a orillas del
Cerro El Tigre (se aprecia pico
nublado en esta foto), el cerro
tiene 1,645 metros de altura
y está rodeado por bellas ciudades
salvadoreñas que bien vale la pena
visitar... Si no fuera porque
ir a estos “lejanos lugares” hoy día lleva dosis de peligro
debido a las maras y malandros, un recorrido a visitar nuestros pueblos y
ciudades en el interior del país vale la pena.