Tenías muy pocos años,
que al hablar, balbuceaste
preguntando: "¿Cómo es Dios?"

Como es físicamente, no lo sé
pero no se necesita ser esciente
para saber qué es Dios...

Insististe: "¿Qué es Dios?"...

Es el aire que respiramos,
el fuego que quema,
la tierra que nos sustenta,
el agua que bebemos,

Él está en el prójimo que amamos,
los animales que convivimos,
la planta que cultivamos,
el mar que nos separa,
los ríos que navegamos
la imponencia de las montañas,
la majestad de los volcanes...
los astros que al vacío brillan,
la luna que la noche embellece,
el sol que señorea el día,
la tempestad que al sol desfallece,
la lluvia que la tierra sacia....

Dios es los escritos de Isaías,
las enseñanzas de Jesucristo,
el peregrinaje de Mahoma,
los cantos líricos de Orfeo,
La sabiduría de Confucio,
los percances de Khrisna,
la filosofía de Pitágoras,
los escritos morales de Mitra,
la meditación de Buda...

Dios tiene muchos nombres,
pero Él es uno sólo, único.
Y no tiene preferencias por nadie
pero pondera nuestras acciones...

Ningún nombre de Dios
es mejor que el otro,
si se le reconoce,
se le adora con rectitud,
y se le obedece sin cavilaciones;
Pero Él no manda ejércitos criminales,
ni masacra; ni se presta para santificar
codicias y agresiones... y no tiene pueblos favoritos.

Aunque en su nombre
se han hecho matanzas inocentes,
por fanatismos insensatos,
no debía mezclarse su mensaje espiritual
con lo material y mundano.

Hijo, para mí,
Él es Paz, Amor y Salvación...